Sarasa es una chica huérfana que se gradúa en la real academia de alquemistas. Su tutor le regala una tienda a las afueras, para que la regente con sus dotes para la alquímia. Cuando llega, la tienda está en ruinas, por lo que tendrá que esforzarse en reconstruirla, conseguir los ingredientes necesarios para sus productos y vendérselos a sus clientes.